>> En la infancia eran los dulces de Halloween; te escondías de tus padres y comías hasta ponerte malo. En la universidad era la peligrosa combinación del tequila y bueno… ya sabéis. En la cirugía hay que disfrutar de los buenos momentos, porque no suele haber tantos como desearías, lo bueno no es siempre lo que parece. Abusar de cualquier cosa, incluso del amor, no es conveniente.
¿Cómo sabes cuando demasiado es demasiado?, ¿demasiado pronto?, ¿demasiada información?, ¿demasiada diversión?, ¿demasiado amor?, ¿demasiado que preguntar?, y… ¿cuando es demasiado para soportarlo?
>> Tengo una tía que cuando te sirve cualquier cosa, te dice: “Dime cuando”. Mi tía decía dime cuando, y nosotros no lo decíamos, no decimos cuando porque siempre existe la posibilidad de que haya más, más tequila, más amor, más de lo que sea, más es mejor.
Hay mucho que decir sobre el vaso medio lleno, sobre saber decir cuando; creo que es una línea borrosa, un barómetro de necesidad y deseo. Depende por completo del individuo y depende de lo que te estén sirviendo, a veces solo queremos probarlo, otras veces no hay suficiente, el vaso no tiene fondo y lo único que queremos es más.
>> Luego
de pensarlo detenidamente y de muchas noches en vela… esto fue lo que decidí:
No existen los adultos. Dejamos atrás lo vivido y nuestra casa, y dejamos atrás
nuestra familia para formar la propia. Pero las inseguridades básicas, los
temores básicos, y las viejas heridas maduran con nosotros. Y cuando pensamos
que la vida y las circunstancias nos forzaron a convertirnos en adultos de una
vez por todas…tu madre dice algo como eso. Maduramos, crecemos, envejecemos,
pero, en general, seguimos siendo unos chiquillos, corriendo por el parque,
buscando desesperadamente encajar.
Buscamos
consuelo donde podemos encontrarlo. Y nos esperanzamos contra toda lógica,
contra todo lo que nos dice la experiencia. Como niños nunca dejamos de
albergar esperanzas.
>> Cuando eres pequeño la
noche te da miedo xq hay monstruos escondidos bajo la cama, cuando creces esos
monstruos son diferentes, la inseguridad, la soledad, el arrepentimiento,
y aunque seas mayor y más sabio, sigues teniendole miedo a la oscuridad.
Dormir, és lo más fácil del mundo, solo hay q cerrar los ojos... pero para
muchos de nosotros el sueño parece fuera de nuestro alcance, queremos dormir,
pero no sabemos como lograrlo... pero cuando nos enfrentamos a nuestros
temores, a nuestros miedos, la noche no da tanto miedo xq nos damos cuenta
de que no estamos solos en la oscuridad...
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada